"Tomando el fresco de la noche , la Luna y yo, nos quedamos solas; cómplice de mis
pensamientos."
Luna ,compañera de mis noches de descanso, tû que observas en silencio dime: ¿dónde está el alma de mi amado?
Quiero preguntarte cuando te vistes de destellos , ¿a qué confines se ha desterrado?
Si supieras cuanto silencio ha revestido mis oídos en cada noche que lo he respirado.
Porque su fragancia se ha estampado en mi piel como un sello de agua, que jamás se ha borrado.
Astro de la magia, reina de infinitos rituales, dime al menos si su corazón entre tantas batallas y aventuras , no se ha fatigado. Pues si es así, dame al menos la pertinencia, luna hechicera, de recogerlo y conservarlo entre los latidos de mis entrañas.
De entre los fulgores de la luz que emanas y el perfume de la tierra recién dormida que el anochecer proclama, mi voz se convierte en duende para susurrar desde los bosques sempiternos, su nombre de hierro.
Y así continúa mi noche, lunera de mil fases, viajera de siglos innombrables, consintiendo tus caprichos al silenciar tus labios, dejándome desconcertada bajo tu misterio.
Ay, distancia! Ay, confín de mi existencia! deja expandir mis alas y dame tregua para alcanzarlo. Derramando mis besos indómitos como lobos, para calmar mi sangre.
Luna consentida, si en este destierro mis alas se cortan y caigo al mar como un ave, arráncame por favor el corazón con tus brazos y entrégaselo para que sea su recuerdo , porque entre corales, peces y abismos, se extraviará como una perla en la arena.
Hija del Cielo, Diosa de los enamorados, concédele a esta loca de amor, el deseo más valioso: que le cantes al oído cuando esté en su letargo, las notas más dulces que le digan que me es imposible dejar de amarlo.
No me digas que me dejas Luna, al ocultarte en tu morada detrás del Sol, solamente permanece conmigo unos minutos más hasta que me duerma en mi lecho de esperanzas, soñando con ese hombre que se me ha extraviado detràs de las montañas y que abre todo mi interior cuando su amor me toca.
Y así me acunes como una madre, antes de que nazca el Sol.
...sólo deja abrazarte mi Luna y como hermana, comprendas el sentir que cada noche me embriaga.
Agualuna
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