El sudor de mi cuerpo, pega sobre mi piel la exquisita sensación que provocan mis sábanas
Cielo, esta noche me siento atrapada por mi propio calor, y a la vez deseada por los suaves brillos de la luna casi completa.
La suavidad de mi cama me invita a tocar tu imagen, me invita a rodar por tantos sueños erotizados, junto a tantas noches deseada, junto a tus susurros y a tu respiración agitada.
Te veo reprimir tus instintos, pero no temas , toma mi mano y sígueme.
Quiero sentir esas sábanas que tantas noches de amor empaparon de sudor y se quemaron al fuego por los exquisitos momentos realizados.
Ya están húmedas, pero a la vez cálidas esperando a que llegues.
Sentir el olor de esa piel pegada a mi piel, me excita y me transporta a un mundo de erotismos que sólo yo sé llegar.
Deseo locamente que cuando despierte, tus manos suaves y firmes atrapen las formas de mi sedoso cuerpo y que al besarme sientas que podemos hervir y hacer realidad hasta la más loca y prohibida idea que se nos ocurra ,porque somos unos locos ansiosos de nosotros mismos, de comernos a pequeños y sensuales mordiscos , explorando cada rincón de nuestros sexos y bebiendo cada pequeña gota que exhala de nuestras humedades.
Ya la noche en mis sábanas se posa esperando atenta tu llegada silenciosa.
Ven, tómame , no te detengas. Despliega todo por el suelo y muéstrame tu naturaleza de hombre; esta noche será nuestra cómplice más fiel.
Conjugaremos todas las emociones que sólo las caricias y los besos provenientes de tus propios deseos y cuando te vea a mi lado otra vez me convertiré en una mujer ardientemente deseada.
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